domingo, 25 de agosto de 2013

Una entrada sin título es un paréntesis automático II

Hoy fue un día pésimo. Herner me dijo que en lugar de tesis, mejor hiciera una tesina y que acabara todo este semestre para ya titularme.

Una tesina tiene un valor académico menor al de una tesis, implica menor trabajo metodológico. Cuando ella me dijo eso lo primero que pensé es que no me cree con el intelecto suficiente para hacer una tesis. Es verdad que no he dado todo de mí, sé que puedo dar más, pero siempre me da miedo toparme con que soy mediocre innata y no se trata de echarle más ganas.

Se me ocurrió la siempre mala idea de contarle esto a mi mamá y digamos que ella siguió el planteamiento de que no tengo intelecto suficiente, peor aún, me dijo que tal vez mi tema no era de interés. Pero su agresión hacia mis intereses y mis capacidades, es decir, su agresión a lo que SOY, todavía era algo soportable. Lo que me tumbó fue que después me dijera que tengo que apurarme y hacer lo que me digan, que al fin de cuentas el propósito de esto es el título, así que el punto es hacer lo necesario para lograr ese objetivo (así eso implique que tenga que abandonar mi tema o abordarlo de otra manera que sea diferente a como yo quiero).

"Tú sólo haz lo que ella te diga que hagas", esa fue su conclusión. Yo estaba que reventaba por dentro, me moría de ganas de preguntarle: "¿Alguna vez has hecho lo que quieres?". Tú, a la que nunca le ha importado el "qué dirán", ¿alguna vez te has atrevido a hacer realmente tu santa voluntad? No creo.

Es que esto no se trata de un maldito título y eso es lo que nadie entiende. Esto se trata de mí, de cómo ha crecido mi pensamiento, de cómo es capaz de resolver lo que antes no podía. Este es mi momento para entrar en mí y pensarme a mí misma. Es mi oportunidad de lograr algo grande, algo que será sólo para mí y a la vez aportará algo nuevo para todos. Pero sobre todo, lo que para mí es más importante es que en esto, por fin!!!!!, se trata de LO QUE YO QUIERA.

Por eso no soporté que ella, una vez más, como toda la vida, quisera forzarme a obedecer. YA NO MÁS!!! Ya no creo poder soportar más, ya no soy una niña, ya puedo decidir por mí. Esta es mi vida y yo soy la protagonista. Yo sabré cómo, cuándo y qué hago.

Ya ha sido suficiente. Los padres suelen pensar que han hecho muchos sacrificios por ti sólo porque te han dado parte de su dinero, pero siempre he pensado que si de verdad les pesa tanto un hijo entonces no debieron tenerlo. Del egoísmo nacimos y hacia el egoísmo vamos.

No me importa lo negativo que eso pueda sonar. Este es mi espacio, puedo escribir lo que yo quiera.
Este es el único espacio que he tenido siempre, el único lugar en el que he podido ser yo. Ya en otra ocasión mi papá lo invadió y lo juzgó, pero poco a poco eso dejará de importarme. Mi vida es más importante, así como su vida fue más importante en otro momento.

Se molestan ahora porque según no los tomo en cuenta en mis decisiones, ¿cuándo me preguntaron ellos si quería ir a esa maldita escuela cristiana?, ¿cuándo me preguntaron si quería ir a esos retiros en lugares horribles y para variar con más cristianos?, ¿cuándo me pidieron mi opinión para tomar una decisión sobre mí? ¡Ni siquiera me piden mi opinión para meter un mueble más a mi cuarto!

Va llegando la hora de que yo también ignore su opinión. Por mucho tiempo me han forzado a hacer cosas que no quiero, a pensar en su aceptación antes de pensar en lo que realmente deseo. Mi voluntad se anuló, se perdió entre la de ellos al grado de hacerme pensar que su voluntad era la mía. Ya no quiero obedecerlos y mi conflicto sigue porque a pesar de todo necesito su aceptación, necesito sentir apoyo, sentir amor... pero ya no soporto que me pongan condiciones.

Todos me exigen y me han hecho creer que yo no tengo derecho a exigir. Me exigen que dé todo de mí sin esperar nada a cambio, pero esto no puede seguir así. Ya no soy una niña, ya puedo decidir.


    







 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario